Manual Explotación de la Red Vial
& Sistemas Inteligentes de Transporte
Guía para profesionales!

Se encuentra usted aquí

Gestión de la Congestión

A medida que los países experimentan una mayor actividad económica y comercial, un crecimiento en la venta de vehículos y aumentan las expectativas de movilidad personal, ésto tiene como consecuencia que, con el paso del tiempo, en algunos tramos de la red de carreteras se producen congestiones de tránsito. A menudo, la congestión es predecible y ocurre regularmente.

Una de las principales tareas de la Operación de la Red de Carreteras es hacer frente a estas situaciones de congestión y tomar medidas que permitan mitigar sus peores efectos (Ver Actividades operación).

Los métodos operativos que posibilitan la gestión de las congestiones incluyen un eficaz trabajo conjunto de los organismos involucrados de vital importancia y el rol que desempeñan los Centros de Control de Tránsito (CCT) (Ver Centros de Control del Tránsito).

CONGESTIÓN RECURRENTE

Una congestión recurrente se define como la congestión que se produce de manera frecuente y regular debido a que la demanda de tránsito es superior a la capacidad de la carretera. Una simple ley de la física (del tránsito) es que cuando la demanda de tránsito se aproxima a la capacidad de la carretera, la calidad del servicio disminuye rápidamente hasta el punto donde la demanda supera la capacidad y el flujo de tránsito se desmorona por completo. Al conjunto de procesos, herramientas y prácticas utilizadas para mitigar la congestión resultante a menudo se lo denomina como la gestión de la congestión; a saber, la gestión de la situación de manera tal de evitar o minimizar los impactos negativos de la congestión.

Una serie de medidas de uso común se describen a continuación. Ellas se dividen en tres categorías:

  • optimización del uso de la calzada
  • distribución del tránsito en el tiempo y el espacio
  • adaptación de la infraestructura vial

OPTIMIZACIÓN DEL USO DE LA CARRETERA 

OPTIMIZACIÓN de las señales de tránsito

El propósito de esta medida es adaptar el funcionamiento de las señales de tránsito para que coincida con los flujos de tránsito o imponer una política de regulación específica, como la prioridad de paso para el autobús. Esto puede ser usado en una intersección determinada:

  • en una carretera principal que está sujeta a variaciones de tránsito (picos vinculados a viajes de temporada o especialmente de fin de semana)
  • en una carretera utilizada temporalmente como una ruta alternativa
  • en un área donde la estrategia de gestión de tránsito cambia en el tiempo

El procedimiento consiste en:

  • el análisis de las interrupciones del flujo de tránsito a las que se debe hacer frente
  • la recolección de datos de tránsito específicos (en particular: recuentos direccionales)
  • la elaboración de planes para las señales necesarias
  • su implementación en el controlador, que puede requerir el agregado de equipamiento de detección o de control a distancia

Los planes de señalización pueden activarse de varias maneras:

  • manualmente
  • en un horario programado
  • por un dispositivo automático que puede detectar las condiciones del tránsito local
  • por un sistema central que tiene en cuenta no sólo las condiciones locales sino también las condiciones del tránsito en una zona o incluso en toda la red

El sistema de control de semáforos también debe tener en cuenta todos los tipos de usuarios, en particular a los peatones, los vehículos de dos ruedas y el transporte público.

Esta acción exige:

  • el monitoreo y correcto mantenimiento del equipamiento, especialmente los sensores de tránsito
  • ajustar periódicamente los controles al tránsito y / o a las políticas de gestión del tránsito
  • la reconsideración de vez en cuando de cuestiones puramente locales y los relacionados con el tránsito pasante
  • la utilización de herramientas de simulación microscópica permite la prueba rápida de diversas estrategias junto con la visualización del impacto que ellas tienen, a la vez que verifica cuantitativamente que se cumplen diversos criterios: el tiempo de circulación en la red, tiempo de espera para las diferentes categorías de usuarios (Ver Control del Tránsito Urbano).

SEÑALes adaptativas DE CONTROL DE TRÁnsito 

La mayoría de las grandes ciudades del mundo actualmente están equipados con sistemas de control de semáforos. ITS tiene que ver con sistemas que se adaptan a las mediciones y situaciones de tránsito real, ya sea a través de la selección en línea de planes de control predeterminados o mediante el cálculo en línea de planes de control hechos a medida (y la combinación de estos dos).

  • Los avances en los últimos años incluyen la contabilización de la saturación a través del uso de sistemas expertos (sistema de CLAIRE en París, Londres) o enfoques de administración de ventanas de tiempo (SCOOT) y la contabilidad de nuevos parámetros de tránsito tales como longitud de colas en intersecciones o los tiempos/demoras de viaje medidos gracias a técnicas basadas en ITS, tales como medición automática de longitud de colas por video, lecturas automática de placas por video y datos de vehículos sonda
  • Generalmente estos sistemas también incluyen la gestión de prioridad de los vehículos de transporte público y de emergencia, y cada vez más información del conductor y el usuario (playas de transferencia intermodal, ocupación de plazas de estacionamiento, el tiempo de llegada del próximo autobús)

(Ver Gestión del Tránsito Urbano)

asignación de carriles

En este caso el propósito es adaptar la utilización de los carriles disponibles a las circunstancias. Esto a menudo implica el manejo de embotellamientos recurrentes en un tramo de carretera resultante de la insuficiente capacidad del tramo o embotellamientos cuando uno o más carriles no están disponibles. Por tanto, esta medida abarca los siguientes campos de aplicación:

  • tramos con una sección transversal restringida que es difícil de ampliar (por ejemplo: pasos elevados, pasos bajo nivel, túneles)
  • secciones convergentes o divergentes que generalmente son adecuadas pero que no están bien adaptados para algunas configuraciones de tránsito
  • zonas de alto riesgo (túneles, secciones propensas a desprendimiento de rocas o vientos fuertes)
  • sitios de construcción

Algunos ejemplos de usos específicos incluyen:

  • asignación de dirección de circulación inversa a un carril en la mediana de una carretera de dos vías
  • utilización de un área de detención de emergencia (arcén) como carril adicional en horas punta
  • contra-asignación de un carril en una autopista dividida (carril utilizado en las horas pico o reservado para el transporte público)
  • prohibición de circulación por los carriles rápido e intermedio a los vehículos pesados (HGV)
  • carriles reservados para vehículos lentos y / o el transporte público
  • carriles reservados para vehículos de alta ocupación (HOV)

La introducción de una medida de este tipo requiere de recursos tales como controles automatizados para verificar la consistencia de las instrucciones proporcionadas por diversas señales de asignación de carriles, una barrera modular o señalización temporal (conos o balizas).

Independientemente del método utilizado, la operación puede ser engorrosa y compleja. Cualquier sistema de control debe ser mantenido en condiciones de seguridad. Por ejemplo:

  • las diversas configuraciones de funcionamiento deben ser compatibles con los signos y reglas obligatorias existentes; esto a menudo requiere el reemplazo de algunas señales estáticas (especialmente instrucciones) con señales variables
  • en un carril reversible de una carretera de dos vías o en un carril de contra flujo de una carretera dividida, el riesgo de colisión frontal entre flujos opuestos lleva a la instalación de dispositivos de separación vertical (balizas u otros separadores)
  • Además métodos de detección automática de incidentes son a menudo necesarios con el fin de reaccionar rápidamente a cualquier situación anormal
  • sistemas automáticos de control también pueden ser implementados con el fin de reforzar la eficacia y la seguridad de los sistemas de control de carril

GESTIÓN DE dinámica de CARRILes

La gestión dinámica de carriles (DLM) permite la asignación de carriles que ha de ser modificada de forma temporal por medio de paneles de orientación del tránsito, señales luminosas permanentes, señales de múltiples caras (DMS), marcadores de LED de la carretera y la instalación cenital de paneles de mensajes variables (VMS) para señalizar el cierre de carriles y la dirección de circulación de carriles.

Las aplicaciones fundamentales de este servicio son: para sistemas de flujo de las mareas, la asignación de carriles en intersecciones, la asignación de carriles en túneles, circulación por el arcén (banquina) (Ver Gestión del Tránsito en Autopistas).

flujo de las mareas

Estos sistemas se ponen en funcionamiento en forma diaria durante los períodos de tránsito punta en los tramos donde se producen congestiones recurrentes, existiendo capacidad disponible en la dirección opuesta (un carril mínimo). A veces en la práctica esto significa el uso de equipamiento especial para mover la barrera central de hormigón de seguridad, aunque algunos sistemas de flujo de mareas simplemente utilizan sistemas de señalización tales como señales de asignación de carriles variables instalados en pórticos. Por razones prácticas el cambio de sentido de circulación de un carril generalmente se hace sobre una base de tiempo fijo (cada día en determinado horario), aunque varias ciudades de los Estados Unidos han puesto en práctica un concepto conocido como "carriles administrados", que permite una reversibilidad más dinámica del sentido de circulación de los carriles.

Por lo que se refiere a ITS, la reversibilidad dinámica del sentido de circulación de los carriles puede hacerse con sistemas que utilizan pórticos. La inversión del sentido de circulación de un carril debe estar siempre sujeta a la validación del operador. La implementación del sistema de flujo de las mareas en forma remota por el operador puede ser facilitada con el uso de cámaras de video (en primer lugar, cerrar el carril; esperar a que ningún coche permanezca en el carril; luego abrirlo en la dirección opuesta).

(Ver Gestión del Tránsito en Autopistas)

CONTROL DE VELOCIDAD

El propósito de esta medida es aumentar la capacidad de una ruta principal y mejorar la seguridad de circulación. Por lo general, se aplica en el caso de embotellamientos recurrentes en una autopista o autovía que experimenta un flujo de tránsito del tipo arranque/detención con detenciones repentinas que causan accidentes. Esta acción funciona mediante la imposición o recomendación de una velocidad de circulación:

  • en grandes pero tranquilos flujos de tránsito, la velocidad media de flujo
  • durante períodos de congestión, velocidades decrecientes de río arriba a río abajo, a fin de ir disminuyendo gradualmente la velocidad de los vehículos que se aproximan al tramo con congestión del tránsito

Los sistemas de control de velocidad han sido más populares en Europa que en los EE.UU. o Japón, y el mayor beneficio se relaciona con dar mas fluidez al tránsito, con un mejor rendimiento y una tasa reducida de accidentes. Las velocidades indicadas (generalmente obligatorias) están dirigidas a reducir la disparidad de velocidades individuales en situaciones en que no existan congestiones y proteger el final de colas cuando se produce una congestión. Los beneficios de los sistemas de control de velocidad incluyen: suave flujo del tránsito aumentando levemente la capacidad, lo que hace que se posponga el momento en que se produce la interrupción del tránsito, y reducción del número de accidentes, especialmente los accidentes por alcance. Estos beneficios se obtienen a través de una reducción efectiva de las velocidades observadas, pero también a través de un aumento de la atención del conductor.

Esta medida requiere:

  • una recolección de datos coherentes y suficientemente densa (caudal, velocidades y tasas de ocupación de carriles)
  • un algoritmo de alto rendimiento
  • paneles de mensajes variables (VMS) a intervalos tales que permiten una contínua visión de los mensajes
  • iniciativas de información consistente (campaña de información local para explicar la operación, recordatorios periódicos de instrucciones)

El monitoreo del tránsito es indispensable: la operación está totalmente automatizada pero un operador debe ser capaz de recuperar el control en cualquier momento si se produce un evento inesperado en la red (por ejemplo, un accidente o deterioro repentino de las condiciones meteorológicas). Esta medida se aplica esencialmente a las carreteras de circunvalación urbana, donde la alta proporción de usuarios frecuentes facilita la conformidad del usuario con la operación y la corta longitud de carretera controlada (por lo general unos 10 kilómetros) promueve la adhesión al control de límites de velocidad.

Más allá de la gestión de períodos de embotellamiento recurrentes, la regulación de la velocidad es una herramienta que puede ser utilizada para la disminución gradual de la velocidad de los vehículos que entran gradualmente al área de un incidente o accidente.

En algunos sistemas (por ejemplo: en la autopista alrededor de Londres y Birmingham en el Reino Unido) la pantalla indicadora de velocidad de circulación límite está acoplada con un sistema automatizado para el control de infracciones (que incluye cámaras de video para la grabación de los números de placas) que emite citaciones a los conductores que circulan a una velocidad que excede un umbral predeterminado por sobre el límite de velocidad.

(Ver Gestión de la Velocidad)

CONTROLES a los vehículos pesados (HGV) 

Aunque es diferente de los métodos anteriores, el control de los vehículos comerciales, especialmente los vehículos de carga, puede ser una parte importante del control de tránsito. Típicamente un sistema de control de carga utilizará GPS y un sistema de teléfonía móvil para gestionar la ubicación exacta de un vehículo y su carga en cualquier momento. Mediante la ampliación de este sistema se puede orientar el transporte de carga a una carretera menos congestionada y de esa forma ayudar a controlar el tránsito (Ver Operaciones y Gestión de Flotas).

La dificultad para conducir camiones y vehículos pesados en la nieve puede derivar en la congestión del tránsito en toda la red. Una solución a esta situación puede ser la organización de los vehículos pesados en convoyes. Este tipo de acción requiere:

  • el trabajo de preparación para la selección de las zonas de aparcamiento seguras, adecuadas para camiones y vehículos pesados
  • estrecha cooperación con las fuerzas de policía para detener a los camiones de gran tonelaje
  • organizar y escoltar los convoyes
  • buen plan de comunicación para difundir la información a los conductores

gestIóN DE INCIDENTES

La gestión de incidentes se define como la aplicación de un conjunto sistemático, planificado y coordinado de acciones y recursos que respondan a prevenir accidentes en situaciones potencialmente peligrosas así como para manejar incidentes en forma segura y rápida. Ésto se hace a través de un ciclo de varias fases: desde la detección del incidente al restablecimiento de las condiciones normales de circulación, incluyendo la notificación inmediata y anticipada de advertencias acerca de posibles peligros o problemas con el fin de evitar accidentes. La advertencia y gestión de incidentes tienen dos objetivos principales:

  • prevenir o reducir al mínimo el riesgo de incidentes o de sus consecuencias
  • gestionar y resolver los incidentes de una manera segura, eficaz y rápida con respecto a tres aspectos en el siguiente orden de prioridad: la seguridad, la movilidad del flujo de tránsito y el control y reparación de los daños

(Ver Incidentes de Tránsito)

 

DIstribución del TRÁnsito EN EL TIEMPO Y EN EL ESPACIO

ASESORAMIENTO DE DESVÍOS 

Esta medida consiste en distribuir el flujo de tránsito en el tiempo y el espacio durante los períodos de tránsito intenso, como los fines de semana largos o eventos nacionales especiales en los que se producen grandes caudales de tránsito en una ruta principal específica o en un área en particular. El principio se basa en la difusión de información:

  • antes del período de gran caudal de tránsito: pronóstico de horarios y áreas problemáticas
  • durante el período de gran caudal de tránsito: información sobre las condiciones del tránsito en ese momento

Estas operaciones requieren:

  • pronósticos de tránsito confiables
  • control estricto de las condiciones del tránsito a lo largo de todas las rutas paralelas o en todo el área en cuestión
  • información en tiempo real y herramientas de publicidad para los medios de comunicación (prensa kits) y los usuarios (mapas, calendarios, folletos, sitios web)

Los documentos distribuidos deben estar actualizados y en ocasiones traducidos a varios idiomas. Resulta difícil evaluar:

  • antes del hecho, la proporción de usuarios que van a seguir las recomendaciones
  • después del hecho, la calidad de los pronósticos de tránsito y el nivel de seguimiento de las recomendaciones por parte de los usuarios

(Ver Eventos Planeados)

guiado colectivo en una carretera

Esta acción, que hace uso de paneles de mensajes variables, utiliza tres enfoques diferentes:

  • un enfoque de "obligatoriedad", usando señales variables de dirección
  • un enfoque de "asesoramiento", usando mensajes que recomiendan a los conductores utilizar una determinada ruta
  • información de tiempos de viaje a un destino dado utilizando distintas rutas alternativas, sin ningún tipo de recomendación

La mayoría de los sistemas son operados manualmente por un operador que es asistido por las salidas de computadoras tales como tiempos de viaje en las rutas alternativas, o simplemente por otros datos del campo (tales como imágenes de vídeo) o mediante estrategias y planes de gestión del tránsito predeterminados, diseñados off- línea para un número dado de situaciones. Estos sistemas generalmente no pueden administrar situaciones complejas, tales como incidentes en una intrincada red de autopistas, situaciones de múltiples incidentes, etc. y son a menudo incapaces de actualizar la estrategia una vez que se implementó la inicial. Generalmente no incluyen pronósticos de la demanda y del impacto de la estrategia en ejecución, por lo que están lejos de producir una estrategia "óptima", e incluso pueden producir peores situaciones que una estrategia de "no hacer nada" (debido al riesgo de crear un exceso de desvío colectivo).

Algunos sistemas más avanzados, tales como el MOLA (Reino Unido) o el VISUM-on line (Alemania), son capaces de simular el impacto de un conjunto de posibles estrategias diseñadas fuera de línea con el fin de ayudar al operador a escoger la mejor opción.

Un sistema, el OPERA (Francia), es capaz de generar automáticamente la estrategia de guiado basada en pronósticos y en un sistema experto en tiempo real, realizando ajustes ella misma en función de los patrones de tránsito del momento y sus previsiones.

Merece ser citado otro sistema de "guiado colectivo en una ruta", en el sentido de que induce cambios en la elección de la ruta por parte de los usuarios: la variación de las tarifas de peaje en autopistas interurbanas alternativas en Francia durante las horas punta con el fin de lograr una mejor distribución del tránsito.

Guiado en una carretera relacionado con el control del TRÁnsito

En este caso se guía individualmente a cada usuario en cada punto de elección de la ruta por medio de navegación satelital adaptada por un equipamiento embarcado en el  vehículo que recibe datos dinámicos de tránsito. La ruta óptima se puede calcular a bordo a partir de los datos recibidos (en general, tiempos de viaje) utilizando un radioenlace unidireccional o calculado en forma centralizada y descargado en el equipo utilizando un enlace bidireccional de corto alcance (Ver Sistemas Vehiculares de Abordo ).

CIERRE DE CARRETERA con DESVÍO

El propósito de este enfoque es eliminar temporalmente de una carretera todo el tránsito, o el perteneciente a una sola categoría de vehículos, que transita en uno o ambos sentido de circulación. La medida se utiliza después de un evento existente, previsto o anticipado que hace que sea imposible o especialmente riesgoso circular en el tramo de la carretera en cuestión. Utilizando una barrera física se impide el acceso a la sección cerrada y, en la mayoría de los casos, el tránsito es reorientado. Dependiendo de las circunstancias, el cierre y el desvío pueden ser:

  • preparados en detalle para un evento específico (obras viales, evento popular)
  • preparados de forma genérica, por ejemplo como parte de un plan de gestión del tránsito (zona de riesgo, carretera principal de alto tránsito, problema identificado por adelantado)
  • improvisados, lo que no es deseable pero a veces resulta inevitable

En el caso de un cierre preparado, la ejecución comprende varias etapas:

  • preparar y comprobar la ruta de desvío
  • marcar la ruta de desvío
  • informar a los usuarios y servicios
  • instalar señalización en el punto de cierre y en el punto de desvío
  • controlar el flujo de tránsito en la carretera de desvío
  • monitorear la señalización

El cierre de una carretera es una operación importante que moviliza muchos recursos: fuerzas policiales, señalización temporal, comunicaciones, centro de control o al menos una estructura de gestión. Esta medida impone severas restricciones a los usuarios y los servicios de viaje y puede ocasionar dificultades para algunas categorías de vehículos en base a las limitaciones de circulación en la ruta alternativa. Cabe señalar lo siguiente:

  • si se cierra un sentido de circulación de una autopista de calzadas de circulación divididas, la solución de transferir el tránsito a la otra normalmente es preferible si el tránsito en la calzada opuesta lo permite, aunque su implementación puede requerir más tiempo
  • si el cierre es temporal, se debe elegir entre el desvío del tránsito y la retención de los vehículos aguas arriba del punto de cierre y su posterior liberación una vez que se pueda reanudar la normal circulación por el tramo.
  • si el cierre es por un período bastante largo (por ejemplo en casos de daños en la infraestructura vial o inundaciones), se deben tomar medidas especiales para quienes residen a lo largo del tramo cerrada y a fin de bloquear físicamente el acceso a la sección peligrosa

Las rutas de desvío deben ser incluidos en la gestión estratégica global de la red de carreteras utilizando mismas carreteras o autopistas para el tránsito de larga distancia o carreteras locales para el tránsito de corta distancia.

CIERRE  DE ACCESOS  

Debe hacerse una clara distinción entre "cierre de un acceso" y "acceso regulado":

  • el cierre impide el acceso por un período bastante largo y los usuarios son alentados a elegir otra ruta
  • el acceso regulado retiene a los usuarios por un corto tiempo, pero se les permite ingresar en la carretera regulada; algunas estrategias permiten el ingreso de grupos de vehículos y otros permiten que ingrese un sólo vehículo a la vez

El cierre de un acceso consiste en cerrar uno o más puntos de acceso a una autopista de calzadas divididas en la que se ha producido un bloqueo del flujo de tránsito o el cierre como consecuencia, por ejemplo, de un accidente, garantizando al mismo tiempo que las carreteras alternativas permitirán a los usuarios completar sus viajes. El objetivo es mantener el tránsito en la carretera por debajo de un umbral establecido de forma de mantener un suave flujo.

La medida puede resultar eficaz durante el periodo de tránsito punta del fin de semana o de intenso tránsito en autopistas interconectadas o cuando la capacidad de una carretera cae a un nivel por debajo de la demanda como consecuencia de acontecimientos fortuitos.Su implementación implica los siguientes puntos clave:

  • acción concertada en virtud de un plan de gestión del tránsito y preparación técnica (instalación anticipada de señales enmascaradas o paneles de mensajes variables)
  • uso de dispositivos de control y coordinación adecuados
  • señales y barreras físicas en el lugar
  • dispositivos para monitorear la carretera congestionado y las rutas alternativas

Una campaña anticipada de información sobre posibles cierres y la señalización adecuada del lugar puede influir fuertemente en la aceptación de la operación por parte del usuario, y el consecuente logro del objetivo en el caso de operaciones planificadas y previsibles. Esta medida puede ocasionar algunos inconvenientes:

  • dificultad para cerrar algunos tramos debido a su geometría, estado o los diferentes flujos de tránsito
  • deterioro de las condiciones de tránsito en las rutas alternativas (exigiendo la aplicación de acciones de monitoreo específicas y / o de regulación del tránsito en estas rutas)
  • cantidad de recursos humanos necesarios en el sitio
  • problemas para comunicarse con los funcionarios elegidos en las comunidades vecinas

Por razones de credibilidad y para evitar el desplazamiento del tránsito de un punto de acceso al siguiente, puede ser necesario tener que cerrar simultaneamente varios puntos de acceso consecutivos.

REGULACIÓN DE ACCESO

El propósito de este enfoque es el de mantener un flujo suave en un tramo o punto de convergencia de una carretera importante que esté sujeto a embotellamientos recurrentes, mediante la regulación del ingreso de tránsito a través de una rampa de acceso. El objetivo es optimizar el flujo en la carretera principal. Este tipo de operación se utiliza esencialmente en las autopistas urbanas, pero el principio se puede adaptar para su aplicación en las autopistas interurbanas durante los períodos de tránsito intenso.

Resulta indispensable una campaña de información y un seguimiento técnico muy preciso para la aceptación de los usuarios y la credibilidad de los dispositivos. Esta medida plantea ciertas restricciones:

  • necesidad de un ingeniería de alto calibre para llevar a cabo estudios de factibilidad y de impacto y definir las condiciones técnicas de implementación
  • dificultades para convencer a los funcionarios y usuarios de la justificación de la operación (inconvenientes obvios, beneficios no tan obvios)
  • poco espacio para el error (rechazo público masivo y continuo en caso de un mal funcionamiento)

La regulación de acceso es muy común en los Estados Unidos y está creciendo en Europa. También hay unos pocos tipos de regulación estática; en la carretera de circunvalación de París, por ejemplo, el ancho de algunos carriles de acceso se ha reducido por pequeñas balizas.

RUTAS VARIABLES

Cuando los problemas de tránsito surgen en una de dos rutas paralelas convergentes (mismo origen, mismo destino, tiempos de viaje similares), en algún momento puede ser efectivo dirigir todo el tránsito hacia la ruta con mejores condiciones del tránsito en ese momento específico. El principio consiste en dirigir el tránsito hacia un destino específico a la ruta con mejores condiciones de tránsito.

Las condiciones del tránsito deben ser monitoreadas en ambas en rutas (tránsito, construcción y eventos locales) y deben ser cumplidas las pautas establecidas.

La implementación se basa en:

  • recolección adecuada de datos para evaluar las condiciones de tránsito en ambas carreteras
  • señales de guiado tradicionales, variables en los puntos de toma de decisión pero constantes en cada una de las dos rutas
  • movilización de personal en el centro de gestión de tránsito de forma de garantizar una gestión coherente
  • por último, movilización de personal para modificar las señales en los puntos de toma de decisión

El potencial de uso de esta medida es muy limitado ya son muy poco frecuentes las rutas paralelas verdaderamente convergentes. Su impacto se limita al tránsito pasante ya que los usuarios locales rara vez atienden la señalización de guiado;  por tanto la efectividad de esta medida depende de la mezcla de tránsito (pasante / local).

regulación Total del tránsito

El propósito de este enfoque es evitar el bloqueo de un tramo o área de la carretera que es difícil de gestionar o plantea un peligro si se produce una cola de tránsito. Se limita el tránsito que ingresa en la sección con problemas. Esta medida generalmente se utiliza en los siguientes casos:

  • una ruta en la que se deben evitar las colas de tránsito para facilitar la atención de emergencias (especialmente el servicio de invierno)
  • el acceso en época invernal a los valles de montaña (riesgo de que usuarios queden atrapados en condiciones adversas)
  • el acceso a eventos deportivos o culturales o a una zona turística que carezcan de instalaciones de aparcamiento de vehículos
  • áreas peligrosas en las que no se debe permitir que se acumule el tránsito (riesgos tecnológicos o naturales)

Normalmente la operación se lleva a cabo bajo un plan de gestión del tránsito (coordinado entre los socios) y en todos los casos bajo el control operacional de una estructura de coordinación. El tránsito se visualiza en una ubicación adecuada (por lo general una cabina de peaje o cruce de carreteras pero ocasionalmente en el medio de una carretera equipada con señales de control de flujo de tránsito) y ajustada en función de las condiciones del tránsito en la zona a proteger (Ver Planes de Gestión del Tránsito).

Se realizan esfuerzos especiales para informar a los usuarios en el sitio mismo y ampliamente río arriba. La zona de retención de los vehículos debe tener una capacidad adecuada, seguridad y confort. Se debe marcar la cola de la congestión de tránsito. Siempre se deben realizar las previsiones para los vehículos de atención de emergencias.

En algunos casos este tipo de medida sólo puede aplicarse a categorías seleccionados de vehículos. Enfrentados a grandes problemas los operadores pueden organizar varios niveles de control, que se implementan en cascada a medida de una zona de retención se aproxima a su plena capacidad. Pueden aparecer algunos inconvenientes o limitaciones:

  • dificultad para convencer a los usuarios y a algunos operadores acerca de la legitimidad de la operación
  • cantidad potencial de personal necesario, especialmente para vigilar un área a ser protegida
  • en ocasiones, innecesaria penalización de algunos usuarios

retención de VEHÍCULOS con grandes cargas (HGVS)

Este procedimiento retira los vehículos pesados de un área problemática (tramos de la carretera cubiertos de nieve, con pendientes pronunciadas o zonas de fuiertes vientos, por ejemplo) reteniéndolos temporalmente en áreas específicas previstas para este fin. Esta medida puede:

  • mejorar la eficacia de la limpieza de nieve o salazón de la calzada
  • reducir el tiempo necesario para restaurar las condiciones normales de circulación
  • minimizar los transtornos a la economía local

La medida se lleva a cabo en las siguientes etapas:

  • reconocimiento de áreas de retención con instalaciones mínimamente compatibles con la duración prevista de la detención
  • convencer a las autoridades acerca de la necesidad de la medida, incluso si la interrupción se encuentra fuera de su jurisdicción
  • procurar que la autoridad de coordinación genere regulaciones que exijan a los camiones pesados a utilizar las áreas de retención por un período determinado
  • asegurar la disponibilidad de las fuerzas policiales para guiar los vehículos pesados a las zonas de retención hasta que se levante la restricción de circulación
  • aplicación de la medida por todos los actores durante todo el tiempo que sea necesario
  • difusión de la correspondiente información por todos los medios de comunicación (radio, VMS, Internet)

Esta operación se asocia a menudo con acciones para ensamblar camiones en convoyes. Algunos problemas que pueden surgir incluyen:

  • recibir la aprobación de las diversas autoridades cuando están involucrados muchos operadores (lo que ocurre a menudo) y cuando el tráfico debe ser retenido en un área no afectada por la interrupción
  • convencer a los usuarios, especialmente a los conductores de vehículos pesados, acerca de la validez de la acción, especialmente cuando el tránsito es retenido lejos o incluso muy lejos de la zona de la interrupción

Es importante el envío de mensajes explicativos a las asociaciones que representan a los conductores profesionales a través de los medios de comunicación con suficiente anticipación y reiteradamente (por ejemplo: anualmente al comienzo del invierno).

 

Adaptando la infraestructura vial

CLARidad DE las SEÑALES de transito

El propósito de este enfoque es promover la previsión de los cambios de sentido de circulación y evitar dudas, velocidades de circulación excesivamente bajas y maniobras de emergencia que provocan el frenado y la inseguridad, al hacer que la señalización de tránsito sea visible, legible, continua, coherente y comprensible por todos. La ocurrencia de frenadas frecuentes y la congestión del tránsito en una intersección o en la divergencia o convergencia de carreteras, no siempre se pueden atribuir a una capacidad insuficiente de la carretera sino que pueden ser el resultado de una inadecuada señalización de guiado. Dar claridad a la señalización se lleva a cabo en varias etapas:

  • verificación del cumplimiento de las normas relacionadas con el uso de las señales, su instalación y la aplicación de marcas
  • determinación de la obligación de su cumplimiento por los usuarios
  • análisis de la reacción de los conductores
  • llevar a cabo mejoras

Mientras que el operador de una red de carreteras está de hecho calificado para verificar que la señalización cumple con las normas que rigen su utilización e instalación, no es así para comprender las causas de la conducta de los conductores; es importante que esta parte del análisis descanse en personas que no tienen conocimiento de la zona local u ocupaciones relacionadas con el tránsito.

APLICACIÓN O MODIFICACIÓN DE regulaciones

El propósito de este enfoque es mejorar la organización del tránsito mediante la modificación o penalización del incumplimiento en forma temporal o permanente de las normas de tránsito. Esta medida se ocupa del frenado o los atascos de tránsito atribuibles a la mala organización del tránsito, como aparcamiento intrusivo, maniobras perturbadoras, mezcla de tráfico inconsistente, eventos semanales. Esta medida se implementa a través de las siguientes acciones:

  • identificar claramente la causa del problema (dónde, cuándo, por qué?)
  • definir con todas las partes involucradas las acciones a ser implementadas y controladas
  • conseguir que la autoridad apropiada defina un reglamento
  • informar lo más ampliamente posible a los usuarios que las nuevas normas son más restrictivas, destacando claramente a la vez los beneficios esperados
  • instalar o revisar las condiciones de la correspondiente señalización
  • hacer cumplir el reglamento (potencial utilización de las fuerzas de policía)

En algunos casos el cumplimiento y la eficacia de las medidas reguladoras sólo puede lograrse si se acompaña con un nivel mínimo de cambios en la infraestructura (tales como la provisión de áreas de aparcamiento, barreras físicas, nuevas carreteras de acceso o carriles de giro a la izquierda).

mejoras en la infraestructura

Muchos atascos de tránsito y circulación lenta están vinculados a un déficit temporario de la capacidad (intersección bloqueada por el tránsito de regreso al final de un fin de semana, por ejemplo). El propósito de esta medida es restablecer la capacidad de un tramo al mismo nivel que en el resto de la carretera llevando a cabo mejoras temporarias de bajo costo a la geometría de la carretera para hacer frente a los flujos de tránsito de puntA o resolver problemas crónicos. Los sitios afectados son por lo general las intersecciones y las medidas correctivas incluyen:

  • Una operación temporaria en una carretera principal;
  • Una medida para complementar una acción más amplia (introducción de una carretera alternativa recomendada, por ejemplo).

Esta operación incluye los siguientes pasos:

  • El análisis de problemas, tales como:
    • muy poca disponibilidad de carriles de detención (en una señal de detención o priorización, en el acercamiento a una rotonda o en un cruce señalizado)
    • la congestión relacionada con la falta o insuficiencia de una zona de detención (carril de giro a la izquierda, por ejemplo)
    • espacios de maniobra excesivamente restringidos (en especial para camiones pesados)
    • mala visibilidad en una intersección
  • Recolección de datos de tránsito (pueden incluir encuestas de origen / destino)
  • Estudio y desarrollo de una propuesta
  • Reelaboración de la geometría y / o la señalización
  • Confirmación de que el problema ha sido eliminado

Debe monitorearse el flujo de tránsito todo a lo largo de la carretera (un cuello de botella puede ocultar otro) y debe mantenerse la seguridad (evitar fomentar altas velocidades).

Más allá de las limitadas mejoras aquí expuestas, en algunas ocasiones pueden ser considerados cambios más extensos a la geometría de algunas intersecciones críticas (diseño de rotondas, intersecciones controladas por semáforos, instalación de pasos a alto nivel); éstos se extienden más allá del alcance real de la operación de una carretera y de su discusión aquí.

 

Referencia

No reference sources found.