Manual Explotación de la Red Vial
& Sistemas Inteligentes de Transporte
Guía para profesionales!
En los últimos años los fabricantes automotrices han ido introduciendo tecnologías sofisticadas de control vehocular para mejorar la seguridad, la eficiencia en el consumo de combustible y el nivel de confort de los conductores, entre otras cosas. Estas nuevas tecnologías son, a veces, llamadas Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor (Advanced Driver Assistance Systems (ADAS)). Estos sistemas usan la tecnología de los sensores, tales como el radar automotriz que ha sido desarrollado específicamente para su uso en automotores. (Ver Sistemas de Control & Advertencia). Ellos tienen un efecto positivo en la seguridad vial y en la gestión del tránsito por medio de la ayuda a los conductores para que mantengan una velocidad y una distancia seguras, para que permanezcan dentro de los carriles y para que eviten maniobras de sobrepaso inseguras. Los beneficios pueden ser ampliados aún más si los vehículos individuales se comunican contínuamente con otros o con la infraestructura vial – los así llamados vehículos "conectados" (Ver Vehículos Conectados).
Ejemplos de control vehicular longitudinal son el Control Adaptativo de Velocidad (Adaptive Cruise Control (ACC)) y el Control de Velocidad Adaptativo y Cooperativo (Co-operative Adaptive Cruise Control (CACC)). El ACC está diseñado de modo tal que el automóvil automáticamente mantiene una dustancia segura con el vehículo que circula adelante, en términos de distancia o de tiempos, como sea programado por el conductor. El conductor especifica la velocidad máxima ( como con el control de velocidad crucero normal) y la distancia siguiente. Un sensor tipo radar embarcado actúa con un vehículo adelante y el sistema de control del vehículo mantiene la distancia especificada. El ACC es, a menudo, acompañado con un sistema de alerta de coisión frontal que avisa al conductor en el caso de que una obstrucción peligrosa se encuentre delante suyo. Incluso, se puede comenzar a aplicar los frenos si el conductor falla al hacerlo.
La investigación está tomando lugar combinando el ACC con intercomunicaciones entre vehículos. Con el agregado de las comunicaciones, el ACC se convierte en un CACC. Las comunicaciones permiten que la relación de aceleración y de desaceleración del vehículo de adelante sea comunicada en tiempo real al siguiente vehículo (varias veces por segundo). La ventaja real del CACC es que reduce la demora en el tiempo de respuesta del vehículo que circula detrás.
Alguno de los automóviles nuevos de alta gama que están en el mercado incluyen actualmente sistemas de alerta sobre salida del carril y sistemas de ayuda para mantener el carril. Éstos mantienen un seguimiento de la posición relativa del vehículo al circular por un carril. Usan un conjunto de sensores tales coo sensores de video montados detrás del parabrisas, sensores laser en el frente del vehículo y/o sensores infrarrojos bajo el vehículo. Los sistemas de alerta solamente suenan si el vehículo comienza a desviarse del carril, mientras que los sistemas de ayuda a mentaner el carril pueden tomar una acción para retornar al vehículo a una posición segura dentro del carril.
Combinando tecnologías, la próxima evolución en sistemas de control vehicular son los vehículos autónomos.
La Administración de Seguridad Vail en Autopistas de USA (US National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA)) ha definido cinco niveles de automatización, para describir sistemas con distintos grados de autonomía, de la siguiente forma:
El automóvil Google es un ejemplo de qué existe en desarrollo y en prueba en California. youtube (Ver Video)